Ausencia de ti

Un desgarro en la envoltura del vacío, un escape de algo jamás existente. Tu huida escurridiza hacia la oscuridad. Un momento para recapitular y aceptar que lo bueno, bueno fue. Que lo malo no existirá, simplemente será ausencia. Ausencia de ti.
El complemento perfecto, esfumado por completo. Esfumado no para siempre. Volverá su mínima parte para recordar el daño. No te olvidarás jamás.
Y rascará y rascará hasta que el dolor sea insuperable. Y en ese entonces, sabrá que hacer.

La decisión de la desaparición nunca fue sencilla. Nadie lo dijo. ¿Pero qué es el verbo sin su complemento perfecto?
Tú eras el mío. A pesar de que ni siquiera tú, el único ser del que esperaba comprensión lo hiciera.
Nadie espera eternamente, eso lo se yo.




Norit.

Bye Bye bichito.

Tratarlo con la razón y ver que no es más que un proceso biológico no me vale. Tampoco que sea acción de la gravedad. No veo la metáfora.
Y sí, me voy a cabrear contigo, por muy injusto que sea! Aun adoptando tu misma postura!
Siempre tan típico. Siempre tan predecible.